Cuidados básicos
Afortunadamente, cada día son más las personas que toman conciencia de que adoptar una mascota no es una decisión que deba ser tomada a la ligera, fruto de un arrebato o de una ilusión pasajera. Por el contrario, ha de ser una decisión muy meditada, pues lleva aparejada una responsabilidad que te acompañará tantos años como viva el animal.
En el caso del cane corso, su promedio de vida se sitúa entre los diez y los doce años. De ti depende en gran medida que llegue a alcanzar esa cifra, e incluso a superarla, con una buena calidad de vida.
Los cuidados del mastín italiano, que no es precisamente un perro delicado a nivel físico, son sencillos por lo que no tendrás que dedicar demasiadas horas a su mantenimiento. De todas maneras, es importante que conozcas algunos aspectos sobre el cuidado de esta raza que todavía no está demasiado difundida en España, ya que aquí se está dando a conocer y a desarrollar de un tiempo a esta parte.
Alimentación
La nutrición es esencial tanto para el estado de salud como para la bonita apariencia física de un can. Siempre ha de enfocarse a la raza de perro, a sus posibles carencias nutricionales y al tipo de actividad que el mismo desarrolle a diario.
Los alimentos industriales que les demos han de ser de alta gama, ricos en nutrientes y bajos en grasas, con el adecuado equilibrio entre alimentos energéticos y proteicos, de modo que no den lugar a insuficiencias energéticas que obliguen al cuerpo a gastar sus proteínas, en lugar de reservarlas para las funciones plástica y de reparación de los tejidos.
Higiene
La higiene de un perro está orientada tanto a mantenerlo limpio y saludable, a salvo de infecciones, como a facilitar la convivencia en familia, que se vería indudablemente afectada si el animal empezara a oler desagradablemente.
Los ojos y orejas del cane corso son zonas sensibles que deben ser objeto de una limpieza diaria por parte de sus dueños. Las uñas también han de ser revisadas periódicamente.
Higiene dental
Acostumbrar a tu perro desde cachorro al cepillado periódico de dientes es uno de los mejores regalos que puedes hacerle en aras a favorecer su buen estado de salud. Puedes valerte para ello de los múltiples artículos para la limpieza bucal de perros que el mercado pone a tu disposición.
Está demostrado que el estado higiénico de la boca de un can está estrechamente relacionado con la posibilidad de desarrollar o no la enfermedad periodontal, que puede ocasionarle pérdidas de piezas dentales, así como otras graves patologías cardíacas, renales y hepáticas, por lo que podemos afirmar que un perro sano, tiene siempre una boca limpia.
Baño y secado
Bañar a un perro de las dimensiones del mastín italiano no es una tarea simple. En verano, te será más sencillo pues puedes hacerlo en el jardín, ayudándote con una manguera. En invierno, las frías temperaturas hacen que debas introducirlo en una bañera con agua tibia. La frecuencia ideal del baño se sitúa en uno cada seis u ocho semanas.
No olvides utilizar un champú canino específico para el pelo de la raza en cuestión y aclarar abundantemente con agua, para que no queden restos químicos en su piel que le causen reacciones alérgicas.
Una vez fuera del baño, deberás asegurarte de que queda bien seco, para lo que un potente secador eléctrico que utilizarás a temperatura moderada, se convertirá en tu mejor aliado.
Cepillado
El pelo del perro corso italiano no requiere corte y su mantenimiento es mínimo. Bastará con un cepillado semanal con el que eliminarás el pelo muerto y las partículas de suciedad. Lo efectuarás con un cepillo de púas suaves y cortas que no dañen su dermis. Aprovecha estos momentos íntimos para estrechar los rasgos de afectividad con tu mascota, mimándola y creando un clima que propicie que este hábito se convierta en un placer para ella.
Vacunas y tratamientos antiparasitarios
Tan pronto como adoptes tu cane corso, debes acudir a la consulta del veterinario con el objetivo de que le coloquen el chip, le efectúen una revisión a fondo y, finalmente, este profesional establezca para tu perro el obligado calendario de vacunaciones que refuerce su sistema inmunitario y defensivo.
Los parásitos del tipo de las pulgas, las garrapatas y los gusanos intestinales también es necesario combatirlos, mediante la colocación de pipetas y collares antiparasitarios que encontrarás en establecimientos especializados.
Enfermedades más comunes
El mastín italiano es un perro sano por naturaleza pero que, como cualquier otro, ha de ser revisado regularmente por el veterinario. Para ello, debes llevarlo a su consulta cada seis meses a poder ser. Una completa analítica descartará problemas de salud incipientes en tu can, cuya detección precoz puede ser crucial para el mismo.
No escatimes en este tipo de gasto y recuerda que entre las enfermedades que es propenso a padecer este perro se encuentran la displasia de codo y de cadera, característica de los perros grandes, la hiperplasia vaginal, la torsión gástrica, el golpe de calor, los problemas respiratorios, el entropión y el ectropión, la hipertrofia glandular y los brotes de sarna demodex cuando nacen.